Cuatro años más tarde...
Los tres pequeños corrían fuera de casa mientras otros dos de tres y dos años intentaban imitarles.
Con pasitos torpes y no sintiéndose seguro, un sexto niño de un año apareció en la puerta.
-'o tamben, 'o tamben-
-Daidííí-
Daylhan asomó nervioso al oír el llamado de uno de sus hijos.
-¿¿Por qué gritas Alek??-
-Owen quiere jugar pero se puede caer-
Rodando los ojos, el castaño cogió al de un año.
-Aún no puedes jugar con ellos Owen, eres muy pequeño y te puedes hacer daño-
Owen hizo un puchero al mismo tiempo que fruncía el ceñito.
Daylhan vio entonces el enorme parecido con Derek y besó la cabecita del niño.
-Le echas de menos ¿Verdad?-
-Atha cando vene-
-Pronto, vendrá... pronto-
Realmente mentía.
Su esposo se había ido.
Tuvo que irse...
Porque los inútiles de su antiguo pueblo no tenían ni líder ni nadie quien quisiera el cargo.
Así que,como K