—Buenas tardes, Ximena. Es un gusto volver a tenerte aquí—, dijo el doctor Thomas cuando abrió la puerta del consultorio para recibir a la feliz pareja que ese día finalmente sabría el sexo de su bebé.

—Muchas gracias, doctor. Estoy realmente emocionada. No puedo creer que al fin sabré si es niño o niña—, dijo Ximena bastante contenta.

—Señor Félix—, saludó Thomas asintiendo solo con la cabeza al ver que Félix estaba molesto y su rostro decía lo muy enojado que estaba.

—Doctor Thomas...

Félix continuaba muy enojado por el horrible desplante que Ximena le había hecho la noche anterior.

No estaba acostumbrado a recibir un no como respuesta, y mucho menos si se trataba de una de sus esposas trofeos.

—Muy bien... ¿Qué les parece si empezamos?—, preguntó el doctor Thomas muy emocionado. Él también quería saber cuál era el sexo del bebé..

—Por supuesto, doctor. Hagámoslo—, dijo Ximena comenzando a prepararse para subir en la camilla.

Mientras tanto en la mansión Lancer.

Gertrudis no