Pasaron quince minutos y el coche de Dominic apareció a la vista.
Tiffany se enderezó el vestido y caminó hacia él.
Dominic abrió la puerta y salió del coche, apoyando su alta figura contra él mientras observaba a Tiffany acercarse.
El corazón de Tiffany latía con fuerza por los nervios, pero aún as