Jessie se quedó helada, y las lágrimas comenzaron a fluir con más fuerza. Entre sollozos, alcanzó a decir:
—¡Lo siento!
Lo sentía, aunque sabía que Alessia no tenía nada que ver con la muerte de Nolan, no podía evitar sentirse incómoda cada vez que la veía.
Lo sentía, aunque era consciente de lo bue