Iris y su familia cenaban en compañía de los padres de la novia. Archie llegaba unos minutos después de iniciada la cena; había ido a la iglesia para ultimar detalles con el reverendo. Después de ver varias opciones, decidieron por un almuerzo en familia. Aparte del reverendo y su esposa, asistirían algunas amistades de Iris y el señor Rob. Algo muy íntimo y familiar.
-Me alegra tanto que nuestras familias se unan. Archie es una excelente persona; estoy feliz por mi hija, y brindo por la felicidad de todos los presentes-. La madre de la novia levantaba la copa en alto.
-Sí, brindemos. Que nuestros hijos sean felices y que pronto tengamos hermosos chiquillos corriendo por los jardines-.
Archie sonreía, mientras que Kimi argumentaba que lo importante era disfrutar el matrimonio. Después, con calma, ellos tomarían la decisión de tener hijos; si realmente no deseaban ser padres, no habría problema alguno.
-Qué cosas dices, Kimi. Tus comentarios son tan desacertados como siempre. Propongo