Mundo ficciónIniciar sesiónEntré por la parte de atrás, justo como él me sugirió, mientras una extraña sensación me albergaba, al darme cuenta de lo mucho que me apetecía verle. Subí las escaleras, y me detuve al verle allí, con la puerta abierta, esperándome.
Ambos nos sonreímos el uno al otro, mientras yo entraba en su casa, y él cerraba la puerta tras de mí, seguimos avanzando hacia el salón, y entonces me detuve para mirarle, dispuesta a hablar por primera vez desde que había llegado.







