Sahar es una joven valiente que da su paso al frente por liberar a su gente. Desgraciadamente, es traicionada y no solo pierde a su prometido, sino que también es vendida. Para salvar a su familia debe aceptar un matrimonio y servir de carnada para que su padre ataque a su enemigo y futura familia política. No obstante, a pesar del odio y desinterés, el amor será capaz de abrirse camino. Junto a Rogel, comenzará a construir un futuro, pero los secretos serán revelados y lo que parece no es. La vida de Sahar aún está en un campo minado y posiblemente su felicidad estalle en mil pedazos.
Ler mais—¡Necesito refuerzos en esa zona! Si logramos tomarla esta guerra habrá acabado, estamos a pasos de liberar nuestras tierras.
—Ali… solo espera que nos confirmen, por favor.
Se acerca y toma mi rostro sonriéndome con sus perfectos dientes, para luego besar mis labios y seguidamente mi frente.
—Hemos esperado cuatro años amor, quiero terminar esto para poder verte vestida de novia caminar hacia mí. —Muerdo mis labios, porque es lo que más deseo en este mundo. —Pero… si algo me pasa promete nada más que serás feliz y protegerás a nuestra gente.
—No hagas eso… No te despidas de mí.
—No lo hago Sahar, solo quiero que sepas lo que me gustaría que hicieras si no estoy. Ser feliz y seguir adelante, nunca dejar de luchar porque eres una guerrera sin igual mi hermosa novia.
Las lágrimas se salen, sin embargo, las seco, no puedo dejar que me vean llorar y él sonríe por eso.
—Te amo Ali.
—Yo más.
Nos besamos para luego dejarlo ir a la avanzada, voy detrás de él cuando sentimos en segundos el final. Lo miro y él me ve, siento su despedida.
—¡Ali!
Y así todo se volvió oscuro, sus bellos ojos negros llenos de amor y nuestro mundo pasó al olvido. Despierto llamándolo, unos brazos me envuelven y siento el peso de varias personas sobre mí. Me doy cuenta de que son mi madre y hermana quienes me abrazan, y lloran.
—¿Dónde está Ali?
—Hija… —Mi madre se aparta y me observa con ojos tristes, muerde sus labios—. Lo siento Sahar, se ha ido.
—¡NO! ¡NO! ¡Él está bien! ¡Prometió casarse conmigo!
Mamá toma mi rostro y lo besa, me dice que todo estará bien, que saldremos de esto. Pero no proceso, solo quiero Ali, mi Ali me ha dejado.
—¡Deja de crear tanto escándalo Sahar Jayas!
—¿Tío?
—Si, yo, no te basta con poner a tu familia en peligro. ¿También vas a avergonzarnos en el hospital?
—¿Peligro? ¿De qué hablas?
—Abdul, este no es el momento.
—¡Cállate, Meli!
—A mi madre no le grites y dime que está pasando.
—Ja, sigues siendo la misma fresca de siempre. No obstante, te dejaré pasar por esta vez tu falta de respeto. En cuanto a la situación en la que estamos por tu culpa, es sencillo, tú has sido marcada como enemiga pública y contigo todos nosotros.
—¿Enemiga pública de quién?
—Del país, por supuesto, el nuevo régimen está a punto de sentarse en el trono y hará limpieza de todos sus enemigos.
—¡¿Hemos perdido?!
“No me lo puedo creer, después de tanto sacrificio, de tantas vidas perdidas, nuestro pueblo ha caído. Ali, amor, perdónanos. Perdón, a nuestra gente por fallarles”. Mis manos están en mi cabeza, no sé qué hacer, es la primera vez que estoy tan perdida y no quiero seguir luchando.
—Por suerte tenemos una salida. —“Siempre he odiado a este hombre, lo único que hace es aprovecharse de los demás. Es un vago y flojo que mi madre mantiene por ser su hermano menor, pero por mí ya le hubiese arrancado la vida”. Lo miro para que siga, yo no tengo nada que perder, mas, mi hermana y mamá no merecen sufrir por lo que escogí para mí—. He contactado con tu padre Amed Xaham y ha ofrecido su ayuda.
—¿Cuál es la trampa? Ese hombre nos abandonó, así que algo ha de querer.
—Hija, insiste en que quiere ayudar a su familia, según él está arrepentido.
—¡Ja! Dieciocho años tarde, no crees mamá, no le creo nada.
—¡Entonces dejarás que tu hermana y tu madre sean asesinadas! Solo porque no confías en tu padre.
“¡Demonios! Odio cuando me arrinconan y no puedo pelear”.
—Okey, haremos como dices tío, aceptaremos la ayuda de mi padre. Por favor, cuídalas bien allá, al menos eso puedes lograr. ¿Verdad?
—¡¿Qué?!
Los tres gritan a la vez y los miro a todos, que pretenden. “Voy a morir aquí con mi gente, no luche por nada”.
—Sahar… Creo que no has entendido, tu padre exige que vayan todas o no iremos ninguno.
—¿Cómo?
—Tu tío tiene razón, cariño, es todos o ninguno.
Trato de no gritar, pero ahora mismo solo quiero formar un gran lío, el propio que habita en mi cerebro. En cambio, les pido que me dejen sola, pretendo pensar. Al menos ese espacio me lo dan y juro que no sé qué hacer, miro al techo y ambiciono escapar, pero el yeso en mi pierna derecha no me dejara llegar lejos. No sé en qué momento alguien entro, mas, solo lo descubro cuando me hablan.
—Sahar mi niña, mira cómo estás.
Dirijo mi vista hacia la voz y ahí frente a mí, los mismos ojos negros que perdí.
—¿Señora Dali? —Las lágrimas comienzan a correr sin poder evitarlo y ella me encierra en sus brazos—. Lo siento, no pude… no lo salve, lo perdí por siempre.
—Shhh, está bien, todo estará bien. Él te amaba mucho y desde donde este desea que seas feliz.
Esas palabras, Dios, por qué esa palabra, la odiaba con todas mis fuerzas. No sé cuánto estuvimos así, ella consolándome, cuando al igual que yo, necesita el hombro de alguien. Ha perdido a su hijo, como se repone eso, no hay forma si era su único bebé. Pero aquí está animándome y diciendo que sea feliz, que lo merezco. Y es la segunda persona que se despide de mí, lo sé, siento cuáles serán sus siguientes pasos.
—Señora Dali, venga conmigo, vámonos lejos de aquí.
—No tengo nada que perder ya hija, tu sí. Salva a tu familia, la masacre está comenzando, pronto llegarán aquí debes irte hoy mismo. Un consejo, mantén a tu tío lejos, ese hombre no me agrada, así que aléjalo de ustedes.
—Lo haré, voy a extrañarla.
Me sonríe dulcemente acariciando mi rostro, para luego besar mi frente.
—Gracias por hacer feliz a mi hijo y amarlo. Ahora trata de formar tú una nueva vida en su honor.
Niego, como puedo hacer eso, Ali fue y será mi mundo por siempre. Y esa sería la última vez que vería a la madre de mi prometido. Luego de eso, acepte irme con mi familia y fuimos embarcados en la noche, corriendo cuáles ratas. No solo mi corazón estaba roto, mi orgullo de guerrera quedaba destrozado y ya no sabía ni quien era, mas, cosas peores estaban por golpearme. Desgraciadamente, no tenía la más mínima idea. Sentada en la bodega abrazando a mi mamá y hermana, nada más dejé que la oscuridad nos acogiera, no sin antes distinguir a mi tío mirarme a modo de depredador y sonreír. Sé que algo se traen él y mi padre, pero lo único claro ahora, es que debo salvar lo que me queda vivo.
Sahar Dos años después: Estamos celebrando la boda de los hermanos Crode con Tanila y Donal. Es una total locura en la finca, es peor que mi boda. Al ser dos bodas en una, el trabajo es doble y más que esta vez, el monarca envió a alguien que celebre la boda de mi hermana. Esta vez sí fue bajo nuestra religión en todos los sentidos, mientras que la otra fue por la iglesia, por supuesto las ceremonias fueron en momentos distintos del día. Lo único que se sostiene a la vez es la fiesta, en esta si unimos ambas culturas y está siendo un total éxito. Hay muchos invitados, pues mi hermana y yo hemos hecho un trabajo duro estos años. Al nivel de que nuestros hombres han montado celos porque dice que estamos rodeadas de demasiados hombres, si supiesen que hemos recibido propuestas indecentes, dejábamos de ser embajadoras en nada. Pero amamos mucho nuestro trabajo, sobre todo porque me ha ayudado a crecer. Ya no soy esa guerrera que solo sabía tomar un arma y matar, ahora soy alguien que mu
SaharUnas semanas después, estoy sentada en un avión, pensando porque diablos hable tanto. Tanila y yo hemos sido llamadas a Seobi por nuestro primo, quiere que estemos presente para su coronación. Estoy nerviosa, regreso a mi país en paz al fin y de cierta forma la felicidad me invade, porque, aunque mi nueva familia no pertenece ahí, son mis raíces.Al llegar fuimos recibidos en el aeropuerto con seguridad, Jamil entre ellos y Mohán. Me dio alegría verlos, nos saludaron respetuosamente, pues somos realeza según ellos. Por cierto, me encanto el tatuaje de mi hermana, le queda bonito y dice que no dolió tanto cuando la marcaron, lo cual me alegra. Mi hermanita es alguien fuerte, me ha sorprendido en serio.Cuando tuvimos que hacer entrada en el castillo, fue toda una parafernalia esto de los rituales y demás. La suerte es que mamá nos entrenó antes de aterrizar, pues ella vivió desde pequeña rodeada del imperio de nuestro país e incluso sin saberlo se casó dentro de ella. Toda una lo
SaharEn el momento que Susana miró a través del espejo, lo supe, lo había descubierto. Solo vi que se movió, sentí ruidos como desarmando algo y de la nada apareció con un tubo de cortina, y, ¡Zas! Desbarato el espejo y me protegí como pude de los cortes. Sentí que me agarraron por el pelo, me queje mientras me jalaban hacia afuera, tome en el camino dos cristales en cada mano y cuando estuve frente a ellas, corte el brazo que sostenía mi pelo.Su grito fue elevado y aproveché cuando se agarró el brazo para alejarme y verlas de frente. El dolor era insoportable, pero nadie va a llevarse a mi hijo, no sé qué pasará, pero voy a luchar hasta perder la conciencia. Creo que ese momento no está lejos, de la forma en que siento como mi hijo está buscando salir.Gracias a Dios, tanto las heridas en mis manos como el miedo me tenían en pura tensión, lo que me hacía equilibrar por ahora mi cuerpo. Cuando la puerta se abrió de golpe y vi a mi esposo aparecer, vi los cielos abiertos. Todo paso m
RogelAl llegar a la habitación, mi esposa había despertado y eso al menos me animo. Enseguida la besé y mimé diciéndole cuanto la amaba, que era mi vida.Mamá Eli protestaba por nuestras muestras de amor y nosotros reíamos, en ese momento logré olvidar mi tempestuoso descubrimiento. Al final le pedí a ella que se fuese a casa, toda esta situación le hizo daño. Sé que se sentía culpable por haberse ido dejando sola a Sahar. Pero de no haberlo hecho, quizás estaría muerta e igual no hubiese resuelto nada. Después de mucho hablar la convencí, todo iba a estar bien, yo me quedaría en el hospital. Ella aseguró que estaría al otro día temprano allí para llevarnos provisiones y se lo agradecí, en el apuro no llevamos nada al hospital. Los demás también volverían mañana, ya que vinieron, pero al verla dormida solo se marcharon, y es que ni siquiera podían conocer al peque aún, así que no tenían nada que hacer ahí.Cuando estuvimos solos, luego de mostrarle las fotos de nuestro Khaled y pelea
RogelLo ignoro y sigo transitando por el pasillo.—Te dije que la habías condenado a muerte cuando salió en estado.—¿Por qué nunca dijiste que la protegiera de esas mujeres?—Porque no podía probar que eran ellas las asesinas.—¿Es en serio?—Nunca tuve pruebas de que ellas mataron a tu madre.—¿Ahora es mi madre?—Siempre lo fue hijo, solo que tuve que ser frío contigo para ponerte a salvo.Lo miré totalmente perdido, de qué diablos iba.—¿De qué hablas?—Puedes dedicarme un tiempo, no será mucho, lo juro.Lo pensé para luego decir que si y seguirlo hasta la cafetería del hospital, donde pedimos un café.—Entonces…—Siempre has sido así de directo como tu mamá, si ella te viese estaría orgullosa de ti. —Sus ojos me miran de una forma rara, puede ser, ¿orgullo—? Sé que te hice mucho daño Rogel, pero créeme, era la única forma de salvarte. Esa casa estaba llena de víboras, de hecho, ellas fueron las culpables de tu secuestro, pero de nuevo no podía probarlo.>>Sé lo crueles que eran
RogelMe he vuelto loco estos tres días lejos de mis amores; quiero tenerla ya en mis brazos. Somos cuatro en el avión, ya que Roberto logró al fin liberarse con su pareja de todas las cadenas que lo sujetaban, y Donal es libre también. El juicio fue duro porque, está claro, hacer caer a una persona con tanto poder es casi imposible. Por suerte, no fui el único con cosas en su contra; lleva haciéndole malas acciones a muchos, y esta vez fue el momento para que saliera toda la porquería a flote.En cuanto a su hija, tampoco quedó fuera del castigo, especialmente cuando fue capaz hasta de colarse en mi cuarto, casi desnuda. Si Sahar se entera, le da algo. Por suerte, justo en el momento en que me llamó por vídeo, acababa de lanzarla fuera de mi habitación. Por su culpa, su padre fue preso y su familia expulsada de la zona donde está ubicada la base. Sus cuentas fueron congeladas, pues el dinero fue obtenido mayormente de forma ilícita. Usaba a nuestros hombres en negocios turbios, como e
Último capítulo