Capitulo 9: "Esposos"
Un jet privado los esperaba en el hangar. Giulia había empacado lo suficiente para tres días. Dios, tres días. Ares se encargó de todo y minutos más tarde, despegaron.
Durante todo el trayecto que se les permitió quitarse los cinturones de seguridad, Ares le mostró a Giulia con quienes harían negocios, desde nombres hasta cuantos millones valía cada uno de ellos. Su trabajo básicamente era apoyarlo en lo que hiciera falta, y mostrarse amable.
Giulia agradeció que, lejos de la tensión que emanaba del otro, la situación se mantuviese profesional.
Al llegar, un auto enviado por los jeques los esperaba.
— No te sorprendas por la ostentosidad de estas personas — le aconsejó Ares, mirando la pantalla de su computador, mientras Giulia miraba por su ventana como el auto serpenteaba la ciudad.
Al llegar, fueron recibidos personalmente por el jeque y su esposa. La bienvenida fue bastante amena y trivial, hasta que el jeque y Ares acordaron que era la hora de hablar de negoc