JACKING:

¡“Control!” —le ordeno por el link—, y siento cómo Amet tiene que sacar todo su control para no convertirse en lobo y correr detrás de Manuel y acabar con él.

—No tienes que hacerlo. Marcus le dio una paliza —contesta Antonieta sonriente—. Nos cuida muy bien.

— ¿Marcus hizo eso? —gruñe Amet, apretando los puños, aunque yo alcanzo a sentir cómo su lobo finalmente retrocede un poco. 

— Sí, los chicos siempre nos defendieron de ellos —sigue contacto Antonieta mientras lo besa en la mejilla. —Ven vamos, los demás están esperando por nosotros.

Las palabras de su mitad son bálsamo para la bestia, aunque sé que las ganas de cazar al idiota de Manuel todavía hierven en el fondo de su ser.

—Oye, Amet —habla Marcus acercándose sonriente—, dame esa mano, ere