CAPÍTULO 30. LLEGÓ EL MOMENTO
—Buenas noches —expresó con voz nerviosa.
William se aproximó a ella y le dio un besó cerca de la comisura de sus labios, acto que le erizó la piel, inhaló profundamente, sintiendo como el embriagante y varonil, aroma de su fragancia se colaba a través de sus fosas nasales, provocando que su cuerpo se estremeciera, sintiendo una punzada en su vientre, estacionándose en su zona femenina.
—Ho-la —Camila se aclaró la garganta al pronunciar tan simples palabras.
—Ordené que nos traigan la cena a la sala de tele —anunció—, me acordé de una vieja película, me gustaría que la viéramos juntos.
La mirada de Ivy se iluminó.
— ¡Qué buena idea! —exclamó con la mirada llena de brillo.
—Voy a ponerme ropa cómoda. —Aflojó el agarre de su corbata, y retiró su saco.
Camila contuvo el aire, al apreciar lo bien que se veía con esa camisa ajustada. Sacudió su rostro y se dirigió a la cabina de baño a colocarse el pijama, mientras Ivy corría a buscar su ropa y sacarla de la cajonera.
Al llegar al cuarto d