Mundo ficciónIniciar sesiónNiego con la cabeza, con voz suave pero firme, con una serena convicción en mis palabras.
—Aquí no me quedaba nada. Mi relación con mi padre estaba prácticamente rota por culpa de mi madrastra y mi hermanastra. Irme contigo es una oportunidad para empezar de nuevo, para escapar de la red tóxica que me asfixiaba.
Nash asiente, sus ojos oscuros escudriñando los míos, sondeando las profundidades de mi alma.
—¿Y tu madre? —pregunta con un tono suave, casi tierno, un marcado contraste con su habitual presencia imponente.
Aprieto los puños, un dolor familiar me invade el pecho, un dolor que nunca desaparece del todo. Es una herida que he llevado conmigo durante tanto tiempo, una cicatriz en el cor







