Leonardo miró a Natalie con agresividad y tristeza, —Te dije que no le gustaría a Javier, pero no lo creías... Es mejor que me vaya, Javier no quiere...

Al ver la angustia de Natalie, Javier se enojó al instante, ¡Leonardo lo hizo a propósito!

—Natalie, no le hagas caso, he visto a mucha gente así... Está fingiendo...

—Javier, sé que no te gusta Leo, pero me dijo que intentaría conseguir tu bendición. Ya verás lo bueno que es cuando hayas estado con él más tiempo.

Javier casi escupió sangre, y después de respirar hondo, sonrió de repente y apretó los dientes, —¡Bien, definitivamente descubriré lo bueno que es poco a poco!

Después de decir eso, miró a Leonardo y le dijo con una sonrisa, —Ya estás aquí, vamos a cenar juntos, de lo contrario la gente dirá que la familia Silva es mala y ni siquiera te dejará comer.

Leonardo sonrió, —Gracias hermano, sabía que eres buena persona.

Javier: —...

No, no podía dejar que este cabrón robara a Natalie, debía encontrar la forma de separar a Leonardo