Nora dijo burlona, —¿Crees que tengo miedo? ¿La familia Mil tiene el control de toda Imperialia? Te lo advierto, a partir de ahora, cuando nos veas a Natalie y a mí, más te vale dar un rodeo o te pegaré si te veo. ¡Eres una zorra, no te creas que eres una santa!
—¡Tú!
Olivia estaba tan enfadada que quería arrancarle la cara a Nora.
Natalie miró a Leonardo que tenía la cara helada, cerró los ojos y dijo —Nora, vámonos.
Ya no tenía nada que decirle a Leonardo, si se volvían a ver, solo serían desconocidos, no quería seguir perdiendo el tiempo con él.
Nora giró la cabeza, al ver a la cansada Natalie, se sacudió la mano de Leonardo y sostuvo a Natalie.
—¡Vamos!
Natalie no miró a Leonardo y se dio la vuelta.
Leonardo estaba sin expresión en la cara, por lo que nadie podía saber lo que estaba pensando.
Hasta que Natalie y Nora desaparecieron, el presentador se apresuró a decir: —Es sólo un pequeño accidente, no se preocupen, continuemos con el brindis.
Durante las siguientes sesiones, el ros