Punto de Vista de Judy
Me quedé en shock mientras los gammas rodearon al Alfa Levi. Lila parecía haberse apartado de un salto; su rostro pálido y sus ojos tan abiertos como los míos.
—¡No puedes arrestarme! —gritó Levi, su gruñido oscuro y enviando un escalofrío por mi columna vertebral—. ¿Tienes idea de quién soy? Soy un lobo Licántropo. ¡No puedes arrestarme!
—Bajo las pautas que crearon nuestros ancestros, si llegamos a un acuerdo, los tres... Entonces podemos arrestarte y acabar con tu estatus —explicó Mica, cruzando los brazos sobre su pecho. Se veía tan serio, y su aura era radiante. No pude evitar estremecerme; la presencia de cuatro Licántropos era casi demasiado para cualquiera.
Miré a Edward para ver cómo lo estaba llevando, y tal como pensé, parecía a punto de tener un ataque de pánico.
Gavin mantuvo un agarre firme en mi cadera como si tuviera miedo de que desapareciera. Me sentí consolada por su presencia al menos. Cuando lo miré, estaba fulminando a Levi con la mirada.
—L