Capítulo: Entre mentiras y fotografías
Stephen recorría los pasillos del hospital, con una carpeta de análisis bajo el brazo, el rostro sombrío y el corazón cansado.
Cada día era más evidente que algo no cerraba.
Los exámenes de su madre parecían demasiado graves para lo bien que ella lucía a simple vista. Aunque Margaret se esforzaba en actuar débil frente a él, Stephen —cardiólogo al fin— comenzaba a notar las incongruencias.
Pero la lealtad y el amor por su familia lo retenían.
Ese día, después de una ronda rápida de control, Stephen fue al consultorio de la cardióloga que seguía el caso. La misma doctora que,la semana pasada, había entregado los análisis "críticos".
Ella lo recibió con amabilidad forzada.
—Doctor Jones —dijo, evitando su mirada—. Ya está todo lo que necesitaba su madre. Yo... voy a transferir el caso a otro colega.
Stephen frunció el ceño.
—¿Por qué?
La mujer respiró hondo, como buscando fuerzas.
—Problemas personales. Prefiero no involucrarme más.
Su madre tien