Amor sin Fronteras (mini historia de Joselín y Stephen)
Capítulo - La niña
El invierno de 2008 en Alicante trajo más que frío y brisa marina; trajo un milagro. Lilian y Fabián Torres observaban a través del vidrio empañado de la sala de neonatología a la pequeña criatura que apenas cabía en la palma de una mano. Sus dedos diminutos, envueltos en hilos de vida, se aferraban a la nada como si buscaran un refugio, como si supieran que habían llegado a este mundo antes de tiempo.
—Es tan pequeña… —murmuró Lilian, sin poder contener las lágrimas.
Fabián le apretó la mano con fuerza, sin apartar la vista de esa incubadora que parecía un castillo de cristal. Los monitores pitaban sin cesar, recordándoles a cada segundo que su hija luchaba por respirar, por vivir. Aquella bebé, que apenas pesaba un kilo y medio, se había convertido en su razón de vivir. Habían intentado durante años ser padres, enfrentando diagnósticos crueles y noches de llanto en silencio. Y ahora, aunque prematura,