- ¡Sierra! Junior apareció, corriendo hacia mí y dándome un abrazo.
Incluso me sentí culpable por odiar al chico que apenas conocía. Tal vez era un buen chico.
Me soltó y comenzó a reír, señalándome.
- Giro de vuelta. - dijo Joyce.
Me di la vuelta y ella me quitó una masa pegajosa de la ropa:
- Masa de moldar. Él ama.
- ¿No es capaz de disfrutar de algo útil? - le dije serio mientras pensaba que era gracioso. – ¿Cómo puedes ser tan aburrido, chico?
- Es sólo una broma, hermana.
- No soy tu hermana. Casi grité, saltando entre las cosas en el suelo.
Encontré a Liam bajando las escaleras mientras subía las escaleras.
- Liam, recuérdame que me quite el útero a finales de este año. No quiero tener hijos.
- Incluso me voy a hacer una vasectomía. Dios me puede castigar y enviar a un niño tan ridículo como Junior si tengo un hijo.
- ¿Qué mierda está pasando aquí?
- “Papi” vino a vivir con nosotros... Y trajo a nuestros hermosos “hermanitos”.
- Nuestra madre debe estar loca... Dime que es posi