Capítulo 21

Bajaron al comedor, y la tía Amelia y Eva ya los estaban esperando, por supuesto, habían pedido que se prepara la comida favorita de Santiago, eran tan pocas las veces que las visitaba, que adoraban consentirlo.

Les preguntaron cómo se habían conocido y ellos les repitieron la misma historia, que le contaron a Dinora, la cual a ellas les pareció de lo más romántico.

—¿Pero por qué la prisa de casarse? Prácticamente se acaban de conocer.

—Tía, ¿Crees que le voy a dar tiempo de que se arrepienta? Sólo mírala, es hermosa, dulce, tierna, tiene esos hermosos ojos color aceituna, que hacen que me vuelva loco cuando me miran y esa boquita que cuando dice mi nombre, hace que pierda la voluntad y me convierta en su esclavo.

Victoria se quedó callada, y miró a Santiago, qué bonito había hablado de ella, si no supiera que solo est

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo