Capítulo 77. Loco de remate
Después de que los padres de Alexia entendieran la situación, los ubicaron en su habitación, y Matías, que estuvo todo este tiempo pegado a Alexia para no levantar ninguna sospecha, ya no aguantaba más, pues en realidad quería estar con su dulce y amada Olivia. Dado que había visto la cara que puso cuando su hermano contó lo sucedido, y sabía mejor que nadie que ahora mismo necesitaba su compañía.
Sin embargo, no podía ir detrás de ella en ese instante en que la vio marcharse con lágrimas en sus bonitos ojos, porque Alexia estaba pegada a él como una lapa y no lo dejaba moverse ni un centímetro. Definitivamente, aquella mujer le resultaba tan odiosa, que solo de pensar cómo sería su vida si en realidad llegara a casarse con ella, le daba escalofríos.
Así que, apenas vio que sus futuros suegros ya estaban instalados, empujó a Alexia sin importarle que esta se cayera, y salió corriendo a buscar a su amada Olivia, decidido a confesarle su amor de una vez por todas, pues se dijo a sí mism