Estabamos en la sala, cuando Mario se levantó del sillón donde estaba sentado, marchándose de la sala pero volviendo con una botella de vino y cuatro copas. Abrió la botella echando el líquido a las cuatro copas ofreciendo primero a sus padres una de las copas y seguidamente me dio una de ellas a mi, quedándonos los dos mirándonos a los ojos como si quisiera saber Mario si me encontraba bien, respondiendo yo una tranquila sonrisa. Lucas se acercó de pronto a donde yo estaba sentada abrazandome y dándome dos besos en mis mejillas. Cuando la sirvienta nos avisó de que el almuerzo ya estaba dispuesto en la mesa, nos levantamos todos del sillón para sentarse en la mesa, sentándose Mario a mi lado abrazandome desde atrás, haciendo que mi corazón latiera más deprisa sintiendo como una especie de cosquilleo en mi estómago con las caricias de sus dedos.
—- Y decidme cómo os conocisteis, contarnos algo de ese momento —- comentó su madre.
—- Keira fue a mi empresa ya que yo buscaba a alguien pa