Nikolay abrió la puerta de su oficina y se sorprendió al encontrar a los guardias armados y a punto de ingresar, eran los guardias de Alexandra, por lo que puso los ojos en blanco y les enseñó el arma en sus manos
— No dejen que Alexandra vea el cuerpo — pidió, entregando el arma a uno de sus propios guardias, que no se había inmutado al estar acostumbrado a la situación.
Los guardias lucían confundidos, por lo que recordó que solo tenían permitido recibir ordenes de su esposa, así que se apartó de la entrada y les enseñó el cuerpo sin vida de Ixander
— Apreciaría que fueran discretos, debe haber algunos reporteros esperando en los pisos inferiores — dijo mientras se quitaba la chaqueta del traje y la camisa, la entregó también a uno de sus guardias y se dirigió hacia la habitación, que estaba cerrada con llave desde el interior, así que tocó — Soy yo, tenemos que hablar Alexandra.
La puerta se abrió casi de inmediato, y se sorprendió cuando Alexandra