Tomas levantó el rostro y miró a Renzo y Sara su expresión de alivio de inmediato se notó en su rostro.
— Hola— saludó —¿Cómo están? Que alivio verlos acá en éste invento de Julie.
— ¿De qué se trata?— preguntó Renzo con expectativas— me dijeron que tendría una sorpresa
— Ésta es la sorpresa— dijo Julie sonriendo— quiero que bailemos una danza y estaremos un rato en ensayos con éste coreógrafo que nos ayudará a que salga perfecto.
—¿Es necesario ésto?— preguntó Renzo algo contrariado.
— ¡Será maravilloso, ya lo veras! — dijo Julie, sonriendo.
Tomas se acercó un poco más a su hija y la miró como buscando que lo apoyara, luego se dirigió a Renzo y dijo:
— Estamos perdidos con éstas dos mujeres.
— Presta atención Tomás,— dijo Julie— todo tiene que quedar lo más, lindo, es sólo un baile, no se compliquen y vamos a disfrutar.
— ¡Ah entiendo!— dijo Tomás— me rindo ante lo que nos espera.
Tomás extendió su mano estrechando la de Julie y Sara hizo lo mismo con Renzo y empezó el ensayo,