— ¿Conoces las Bahamas?— dijo Tomás con los ojos iluminados— allí iremos.
— Nunca he ido en luna de miel— dijo ella emocionada— ¡Qué maravillosa sorpresa!
— ¡Me alegra mucho que te guste, amor mio!— dijo Tomás.
Julie lo miró como si estuviera descubriendo a su esposo por primera vez, la había llamado «amor mío» sus ojos se llenaron de lágrimas de felicidad.
— ¡Me acompaña Señora Williams!— preguntó él cariñoso.
— ¡Al fin del mundo mi amor!— dijo ella— ¡Hoy soy la mujer más feliz del universo!
— ¡Y yo, tu más rendido enamorado!— dijo él— ¡Te amo Julie Williams!
— ¡Oh mi lindo amor, también te amo con todo mi corazón!
Fue un beso tierno al inicio y luego profundo y apasionado, se olvidaron que todos estaban allí esperando a que ellos salieran en su viaje de bodas, uno de los invitados dijo:
— ¡Hey, no esperarán a llegar al hotel!
Julie y Tomás con el rostro enrojecido por la vergüenza se subieron de inmediato y salieron en medio de risas y aplausos de los invitados rumbo al a