La habitación permanecía en silencio excepto por el eco de sus propios pensamientos, que resonaban en su cabeza como un huracán imposible de detener, Malakai pasaba de la incredulidad al temor con cada palabra que Magnus había dejado caer sobre él momentos atrás, no era solo el peso de la supuesta misión, que ahora recaía en sus hombros, era la verdad que él mismo llevaba consigo, un secreto que había cambiado por completo su percepción de todo lo que lo rodeaba, hace apenas un mes, la vida de Malakai era simple, casi predecible, como hombre lobo, su existencia giraba en torno al rancho, un vasto territorio que cuidaba con la dedicación y el compromiso que se esperaban de alguien en su posición, bajo el mando de Magnus, el alfa indiscutible del lugar y una figura paterna para él, Malakai aceptaba con orgullo su rol como beta, dirigiendo a un grupo de vaqueros que lo respetaban y lo seguían sin cuestionamientos, aunque era un alfa por derecho propio, nunca sintió la necesidad de desafi