9. Visita del pasado
Tobias Bernstorf
Entramos en el salón justo a tiempo para ver a mi padre ponerse de pie cuando su nombre es anunciado para dar el discurso inicial. Se posiciona en el podio y antes de comenzar, hace un gesto con la cabeza saludando a alguien, y mi madre se levanta y se une a él.
La señorita Vitte llega tarde, pero su retraso está muy bien justificado. Está deslumbrante, lleva un vestido negro ajustado hasta la cadera, con una abertura en el lado izquierdo, mangas largas y un escote en V, qué elegancia.
— H, estás empapando toda la servilleta con tú babas, qué asco — bromeo.
Mi mejor amigo tiene la mirada fija en ella, sus ojos brillan como los de un niño cuando recibe un nuevo juguete.
— Ja, ja, ja, mis mandíbulas duelen de tanto reír — se queja. — Salió de "linda" a "elegantemente sexy".
— Sí, ahora estoy bastante intrigado por conocer a su hermana — digo sin disimular mi interés.
— Señorita Vitte, disculpe mi tardanza, tuve que recoger a mi hermana en el aeropuerto — se discul