POV de Cercei
—No necesito tu compasión —escupió Vienna, con veneno en cada palabra.
—Vienna, hemos estado peleando toda la vida. Y recién ahora habíamos empezado a llevarnos bien —dije, con la voz cargada de súplica, intentando convencerla.
—Nunca nos llevaremos bien. Siempre te quedas con lo que es mío —gritó, dejando salir toda su rabia y frustración.
—No lo quiero. Te lo devuelvo, por favor —rogué, extendiendo mi mano como símbolo de reconciliación. Pero ella me fulminó con la mirada, obligándome a retirarla.
—¿Cómo? Ya lo arruinaste todo —respondió, recorriendo con la mirada las ruinas a nuestro alrededor, aún con lágrimas brillando en sus ojos.
La mansión estaba completamente destruida, prueba de lo intenso que había sido el combate. Los jarrones más caros estaban hechos añicos, los pisos y techos dañados, y manchas rojas cubrían cada superficie.
—Te ayudaré a reconstruirla, esta vez sin crímenes. Podemos empezar de nuevo. ¿Por favor, hermana? —me acerqué a Vienna, tendiendo los