CAPÍTULO 6. La bestia y la zorra
CAPÍTULO 6. La bestia y la zorra
Raven despertó con la cabeza revuelta y el cuerpo aún algo adolorido. Por un instante se quedó tendida, mirando el techo desconocido de la lujosa habitación que ahora debía considerar suya. La alfombra gruesa y la suave luz matinal que se colaba entre las cortinas le daban una falsa sensación de tranquilidad, Pero apenas giró la cabeza hacia el tocador, el recuerdo de todo volvió de golpe.
Se obligó a levantarse, Caminó al baño privado, se despojó de la ropa con movimientos lentos y se metió bajo la ducha caliente. El agua le corrió por el cuello y la espalda, y por primera vez en días pudo respirar sin que se le oprimiera el pecho.
Se quedó un buen rato bajo el chorro, como si el agua pudiera borrarle la traición, pero eso era imposible, porque lo peor de todo era que Ulises se había encargado de envolverla hasta quitarle todo rastro de poder incluso en su propia empresa.
En el último año, todo en su vida había girado alrededor de Ulises. Le había con