Cap. 61 Los objetivos.
—¡Maestra Aida, venga rápido! —dijo Ino, asustada.
Aida corrió hacia ella. Ino apenas había aprendido a usar magia curativa y pensaba que tenía problemas para estabilizar a Karma.
Pero al colocar sus manos sobre él, Aida se detuvo, sorprendida y molesta.
—¿Acaso eres un idiota? ¡Mira cómo estás! Recuéstate para que podamos curarte. Y por cierto… quítate la máscara.
—¿Oye, qué crees que haces? —respondió Karma, sorprendido.
—Ino, ayúdame a llevarlo al sofá.
La Santa, al escuchar eso, se levantó rápidamente.
Ino usó sus armas de caos para cargar a Karma y acostarlo en el sofá.
—Créeme, ya no la necesitarás cuando estés en esta casa —dijo Aida, refiriéndose a la máscara.
La Santa se quedó mirando a Fukushu. Era la primera vez que lo veía sin su máscara.
—Vaya… pensé que la usabas porque eras un verdadero demonio. Pero no estás nada mal.
Erika abrazó a la Santa.
—Me tenías muy preocupada. Dime… ¿qué fue lo que les pasó?
—Lo siento mucho, ella... fue por mi culpa… —dijo Karma.
—¡No hables!