C20- ENVENENADA.
C20- ENVENENADA.
LIONA.
Estaba en la cocina, moviéndome entre el calor de la olla y el aroma del guiso que burbujeaba con suavidad. Tarareaba una canción que solía calmar a mis cachorros. Mi vientre, un poco más abultado, me recordaba que debía tomar las cosas con calma.
Después de que Darius me pidió ser su amante, he mantenido la distancia. No sé si fue por orgullo, por miedo o porque simplemente no quería darle esa parte de mí. Quizás él también lo entendió, porque desde entonces se ha mantenido ocupado con los problemas de la manada. Los lobos rebeldes volvieron a acercarse al territorio, y las luchas se intensificaron. Cada día llegaban noticias de enfrentamientos, de patrullas heridas o de líneas que habían sido cruzadas. Era como si el aire estuviera cargado de tensión, como si algo grande estuviera a punto de estallar.
Mientras tanto, yo tenía mi propio plan. Había estado ahorrando todo lo que podía. Guardaba comida en un rincón escondido de la cabaña: carne seca, frutas deshi