Capítulo 27.
“Mi corazón está roto.” Era esa sensación la que literalmente experimentaba… “Dulces, sueños, mi ángel oscuro y libranos del abrazo del dolor.” Tomé mi celular y salí al jardín trasero, subí por las escaleras y llegué a la platabanda. Necesitaba un momento para procesar.
Ya a solas volví a mirar la foto, el masoquismo podía más que yo en ese instante; sin embargo, yo debía aferrarme a todo el dolor de esa decepción para liberarme y sacar todo este veneno en mi organismo.
Ella era hermosa, era igual de perfecta que él, y yo no tenía el poder de luchar contra aquella diosa que volvía a reclamar su trono. Todos los peores pensamientos se volvían cúmulos en mi mente y a su vez todo comenzaba a tener sentido.
“Fui una tonta que creyó en una historia perfecta y tú, Noah, un maravilloso actor.” Borré la imagen, y necesité tener el poder de hacer lo mismo con los recuerdos de mi mente donde estaban impresos él… Pero eso no sucedió.
Recibí a Noah en mi corazón como un disparo, dejé que un par