Mundo ficciónIniciar sesiónEl jet tocó tierra en el aeropuerto de Málaga-Costa del Sol a las 7:15 de la mañana, las ruedas chillando contra el asfalto con una fuerza que sacudió todo el fuselaje. Valeria tenía el cinturón desabrochado antes de que el avión se detuviera completamente, moviéndose hacia la puerta mientras el piloto gritaba algo sobre protocolos de seguridad que ignoró por completo.
Un coche blindado negro los esperaba en la pista, motor encendido, puertas traseras abiertas. El conductor era un agente de la CNI que Valeria no reconocía, con el tipo de rostro que había visto demasiadas cosas para sorprenderse por nada.
—Señora Costa, señor Costa. —No perdió tiempo con cortesías—. Treinta y cinco minutos hasta que el AVE llegue a la estaci&o







