Mientras Kenton salía con Dylan, Esmeralda se quitaba su conservador y formal uniforme de trabajo y se metía a darse una ducha.
Lourdes sostenía a Alvarito y le hablaba para darle un poco de paz para soportar las próximas horas.
-Más lo alejas y más se acerca. Dylan usó mis palabras como chantaje cuando intenté no llevarlo a la empresa. Es muy listo- Se disculpó justificando sus actos
-No estoy enfadada contigo. Me preocupa Dylan. No quiero que sufra cuando mi estúpido jefe desista de su deseo de seducirme- Lourdes miró a su hijo pequeño y agradeció que no tuviera la edad de Dylan
-Si eso sucede, él aprenderá una importante lección. Intenta protegerte a ti. Él es un hombre de mundo, con experiencia y tu aún no comienzas a vivir. Me preocupa que acabes amándolo y abandonada después- Esmeralda la miró con decisión aún con espuma en su cabello
-Eso no va a pasar. Jamás amaré a alguien como ese hombre. Pase lo que pase, solo preocúpate por Dylan. Del problema mayor me encarg