- ¿Te he dicho que pareces un adolescente? -dijo Massimo viendo a su hermano.
- ¿Por qué? -pregunto Pietro entretenido en la sección de flores.
- Por todo esto… -dijo Massimo señalando las flores.
- ¿Qué tiene de malo? ¡Quiero que todo quede perfecto! Uno no se casa todos los días… -dijo Pietro levantando varias flores y probando posibles combinaciones.
- Bueno, viéndolo desde tu punto de vista… Tienes razón, esta es la primera vez que te casas, ¿Verdad? -dijo viendo cómo su hermano se debatía entre rosas o fresias, o ambas…
Massimo debía reconocer que Pietro al igual que Aria, se habían tomado muy en serio el tema de la boda de ensueño y secreta, ya que la madre de Pietro era quien básicamente había convocado a todos para pedir ayuda.
Era más que obvio que las mujeres D’Angelo, Pellegrini, Vanetto, se pusieron manos a la obra y estaban más que dispuestas a ayudar a Aria.
Por otro lado, en el caso de los hombres, se sorprendían del actuar de Pietro, en gran mayoría, sabían que Pietro e