Massimo sacó su móvil y pidió a Magnus que llevara a Aria, su padre sabía que todo saldría bien, así que se había adelantado. El llevaba consigo a las 3 invitadas, ya que Daniela, un tanto desconfiada, se negaba a dejar sola a la mujer que por casi 10 años la había acompañado y que había adoptado como madre.
- Aria, es momento de que conozcas por fin a tu hijo, su nombre es: Pietro Pellegrini. – Dijo Magnus anticipándose a cualquier detalle que su hijo hubiese olvidado mencionar.
Aria sintió como si las rodillas se fueran a desguanzar, de repente se sentía mareada, pero se aferraba asiento, su corazón latía ferozmente, 48 años sin su hijo, 48 años sin conocerlo, eso era mucho tiempo, de repente estaba por entrar en pánico.
- ¿Y si no me acepta? ¿Y si me culpa de todo? ¿Si solo quiere verme para conocer a la mujer que lo dejó ir? – Comenzó a lanzar preguntas la mujer.
- ¡Aria… querida! Tranquila, ya estás aquí, ahora vamos a abajar, con esa misma determinación con la que saliste del pue