Luego de que Pietro saliera de la habitación donde descansaba Alessia, esta abrió los ojos, ella miraba hacia el paisaje que tenía frente a ella, por momentos se perdía en la imagen que veían sus ojos. Ya no podía sentir nada, su cuerpo estaba inerte, solo podía mover los labios y sus ojos, “¿Qué caso tenía seguir con vida? Ahora era una m*****a inútil” pensaba.
Sus pensamientos fueron interrumpidos por Elijah quien nuevamente llevaba comida caliente para alimentarla.
- Señora, le traigo su comida, el señor me pidió que cuidara muy bien de usted.
- ¡No quiero nada!
- Señora, no haga mi labor más difícil de lo que ya es. ¿Acaso no se da cuenta de cuanto amor le tiene su esposo?
- ¡Ese maldito hombre no es mi esposo!
- Señora, entiendo que sufra frustración por su condición, pero el señor ha cuidado de usted fervientemente, incluso ha puesto a su disposición gran cantidad de dinero para que se encuentre cómoda aquí, el lugar tal vez no sea como lo que usted acostumbraba, pero créame, si