POV DE REYNA
Jessica no respondió, solo me miró por un largo momento, con los ojos oscuros y sin expresión. Su mandíbula se tensó, como si peleara consigo misma.
Luego empujó su silla hacia atrás.
Las patas rasparon el piso, fuerte y claro.
—Déjalo, Reyna —dijo, agarrando su bolso—. Solo déjalo. Vete a casa. Finge que nunca preguntaste nada.
La miré, sorprendida. —Jessica...
Ella me señaló, el dedo firme, temblando un poco aunque intentó esconderlo. —Lo digo en serio. Olvida esto. Olvídame. Olvida todo. —Soltó una risa falsa—. Es mejor para ti no saber nada.
Su voz no hacía juego con sus ojos. Sus ojos se veían asustados. Jessica no le tenía miedo a mí. No le tenía miedo a Jeremy. Entonces, ¿a quién le tenía miedo?
Evité mi mirada y se levantó rápido. —No me vuelvas a llamar.
Luego salió. Tacones sonando. Cabeza en alto. La máscara de siempre puesta.
Pero sus pasos eran un poco demasiado rápidos.
Me quedé quieta unos segundos después de que se fue, con el corazón latiendo muy fuerte,