Especial Cap. 12
En otro lugar.
—¡Jajaja!
De camino de regreso tras una reunión en el restaurante de Brian, Damian se doblaba de la risa dentro del coche, sujetándose el estómago. No podía dejar de recordar aquella escena: Livia prácticamente rogándole que no la obligara a bañarse con él cada mañana y cada noche. Era demasiado gracioso.
‘Debería hacer que se bañe conmigo más seguido. Es demasiado linda.’
—¿Brown?
—Sí, joven amo.
—Livia es tan adorable. ¡Jajaja!
El asistente Brown no sabía exactamente en qué estaba pensando su jefe, pero asintió con una sonrisa paciente.
‘Sí, sí, disfrute de estos días felices, joven amo. Si está de buen humor, yo también. Así el trabajo se hace más rápido.’
—Parece que ahora se tranquilizará un poco y dejará de pedirme cosas raras. Ja, es tan divertida.
Damian realmente la encontraba cada vez más encantadora.
Cuando llegaron a la oficina, su buen humor no se había desvanecido.
—Siéntate.
Brown dudó un momento. En realidad, no había nada que requiriera sentarse, pero c