Entré a mi casa y me sorprendí al ver a Leo en la sala platicando con mis padres. Me acerque a ellos.
- Buenas noches papá, mamá, Leo. Vaya sorpresa, te llamé y te dejé mensaje.- Buenas noches hija, los dejamos platicar- respondió mi papá.- Ana Laura, escuché tu mensaje, te iba a llamar, pero ésto no te lo puedo decir por teléfono.- ¿Qué es tan grave Leo?- Mira Ana Laura. Estoy sorprendido, el día que te llamé en la noche, no me dijiste lo de Marco Antonio y tú. No sé cuál sea el motivo o motivos para ocultármelo.- Perdona Leo. Pensé que sería mejor decirlo en persona- me disculpé.- No te preocupes, estoy confundido con esto de ustedes.- Tú fuiste quién me dijo que saliera con él.- Sí lo sé, es sólo que nunca imaginé ustedes... tú y él... mi jefe... ¡es que son tan distintos!- Ya entiendo, no creías que el me hiciera caso.- No es eso, -suspirando- bueno sí Ana Laura. Y lo peor, nunca pensé que fueras a ser un proyecto de sus chicas mensuale