Marco Antonio y yo nos separamos inmediatamente y mi madre con tono molesto le dijo:
- Es el colmo, el colmo, lo siento, pero debe irse joven -lo fulminó con su mirada.- Señora, disculpe - se levantó del sofá y se acercó a la puerta.- Mamá, no es para tanto, calma - le lancé una mirada furtiva.- Dije, largo Marco Antonio- gritó furiosa mi madre.- Con permiso señora -abrió la puerta- y disculpe. Preciosa, te llamo mas tarde - y salió a la calle sin esperar respuesta.Me levanté y subí las escaleras rápidamente escuchando los pasos de mi madre detrás de mí. Entré a mi habitación seguida de ella mientras cerraba la puerta. Se acercó a mi y me dio una cachetada.- ¿Quién demonios te sientes Ana Laura?, nunca te habías comportado así.- Tú tampoco nunca me habías pegado -respondí mientras me agarraba mi mejilla adolorida.- ¿Como esperas ser tratada?, si te comportas así. Te desconozco Ana Laura y por favor piensa las cosas, no tires a la basura, tu vida y