«Cobarde».
—Cecilia...
—¡Mira, Damián! ¡No sé qué has entendido o qué has creído ver en todo esto que he hecho por ti, pero mis intenciones nunca han sido las de meterme en la cama contigo, ¿de acuerdo?!
—Cecilia...
—Vale, que no, que no estás mal... Es más, antes te estaba mirando y vi que... pues, joder, que tienes tu punto y... ¡Pero que no! ¡No me vas a convencer!
—Cecilia...
—Y encima me lo propones justo después de que te contara que estoy enamorada... ¡Claro, has debido verme débil y confundida y has pensado: "esta es la mía"! ¡Pues no, cerdo!
—Cecilia...
—O sea... en otro momento... Quizás en otra situación... Si no estuviera tan pillada por él, quizás tú y yo... ¡¿Pero qué me estás haciendo decir?! ¡Que no!
—Cecilia...
—Además... ¿tan rápido? No sé... podrías intentar currártelo un poco más, ¿no? Una cena, un cine... ¡Que no soy un trozo de carne, Damián! ¿Cómo pretendes que reaccione si de buenas a primeras me propones ir a mi casa a echar un polvo?
—¿Me vas a dej...?
—¡Ni s