No entiendo la razón por la que mis compañeros parecen tan tranquilos con respecto al hecho de que una chica se quiso matar frente a nosotros. Discuten sobre las posibles cosas terribles que Tristán pudo haberle hecho. Desde haberla violado hasta someterla a tanta presión como para volverla "loca".
Debería traerme sin cuidado que hablen tan mal de Tristán, pero la realidad es que en parte me duele. Es una sensación tan rara e incomprensible que provoca irritación dirigida hacia mis compañeros. Una cosa es pensar que tal vez Tristán la abandonó cuando se dio cuenta de que la chica era depresiva y otra muy diferente es...
―Seguro se enteró de que Tristán mató al que le hizo la novatada y la torturó para que no dijera nada.
Llegaron a mi límite.
―Arrestaron a alguien por ese crimen ―espeto hacia Sebastián― ¿Cuál es tu afán de mierda de culpar a esa familia?
Su risa burlona y su bufido irritado están por sacarme de quicio.
―Antes desconfiaba de ti cada que los defendías ―replica apretando