Como el desayuno en total tranquilidad, preguntándome si algo ha pasado en las redes ya que un nuevo artículo con pruebas ha salido. No se cuando se darán cuenta los accionistas e inversores, pero si mi equipo de relaciones públicas vale lo que le pago, estoy seguro de que han minimizado los daños lo suficientemente rápido para que nadie me moleste. Sin embargo, al leer dicho artículo que pinta a mi padre como alguien sanguinario y cruel que logró el Imperio que domino con jugadas sucias, me enoja porque muestra de prueba una variedad de documentos que lo tildan como alguien que hace movimientos bajo la mesa con personas peligrosas. Extrañado con la autenticidad de lo que leo, busco entre los archivos electrónicos la copia de lo que se muestra. Es cierto, es un documento que papá firmó de su puño y letra, pero el contenido ha sido cambiado lo suficiente para que sea malinterpretado y dejar mal la parte más importante.
Respiro profundo mientras aparto lo que queda de desayuno para poder