Capítulo 14.

Durante las próximas horas me dedico a practicar mi técnica y hacer los preparativos preoperatorios, llego a la salita del café cargado de libros; me devoro uno tras otro y aunque, me sé todo de memoria no quiero que se me escape nada. Le escribo a Renata constantemente, ella me manda fotos jugando con Eros y yo sonrío, es una loquita.

—Ojalá yo fuera la causante de tu risa —Isadora se sienta a mi lado —. ¿Cómo va todo?

—Saldrá perfecto, no te preocupes.

—Miguel —toma mi mano —, lamento mucho que... —mi reacción inmediata es apartar mi mano de la suya.

—Eso es pasado, debo irme, ya es tarde —recojo mis libros y me voy a casa.

Al entrar por la puerta, Eros salta sobre mí y lo aca

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo