Annabelle.
Bastián se acerca a mí, casi parece asustado de que yo este aquí, pues bien, no es el único, porque yo me estoy muriendo de los nervios, y el hecho de que su madre este al lado de él no hace que la situación sea más fácil, al contrario, me perturba un poco.
–¿Qué haces aquí, Annabelle? – me pregunta, invadiendo mi espacio personal.
Yo retrocedo un par de pasos porque estar muy cerca de él me hace daño y entonces respondo – vi en las noticias todo lo que te estaba pasando y quise asegurarme de que estabas bien.
– Pudiste haberme llamado – levanta los hombros.
– No te