Julietta llega al restaurante y se encuentra con la mirada inquisitiva de su amiga, la cual con sólo una mirada ya le pregunta que es lo que sucedió.
Ella sabe que no le puede mentir porque la conoce muy bien y en su rostro se nota cuando no dice la verdad.
Suspira antes de sentarse porque sabe que se viene el interrogatorio.
- ¿Qué pasó?
- Nada
- No me mientas, te conozco desde que teníamos 15 años, trata de mentirle a otro, a mi no. Se que me ocultas algo. Además, ¿por qué te cambiaste de ropa?
- Ehh… pasó algo que no estaba en mis planes.
- ¿Qué? ¿Te despidió? ¿Te gritó? ¿Te dio más trabajo? ¿Te trasladó?
- No, nada de eso…
- Entonces que…
- Me folló encima del escritorio
- ¿Qué? ¿Cómo? No entiendo, vos fuiste a hablar de trabajo. Como fue que terminaron follando en su oficina.
- Basta, calla que no quiero que nadie se entere, si sigues hablando así se va a enterar todo el país.
- No lo puedo creer, tenemos que llamar a Eva y a Sofi.
Evangelina Ramírez es economista y es amiga de Julietta y María desde la preparatoria. Sofía Gutiérrez es arquitecta y se unió al grupo en la universidad gracias al engaño de un exnovio, el cual estaba mandándole mensajes a María mientras estaba con ella y ninguna de las dos sabía de la existencia de la otra, hasta que un día el infiel dejó el móvil olvidado en el departamento de María y ésta atendió una llamada de Sofía, desde ese momento se volvieron amigas las cuatro.
- Voy a llamarlas.
María llama a las chicas en conjunto haciendo una videollamada grupal, las dos atienden enseguida.
- Hola Maru, Hola Juli. ¿Que son esas caras, que pasó que nos están llamando a esta hora? ¿No tienen a quien mandar preso?
- Hola Sofi
- Hola, chicas, lo mismo pregunto yo jajajaja ¿qué pasó? ¿Porque Juli tiene esa cara de susto?
- No saben lo que hizo nuestra amiga…
- Cállate, Maru, ¿chicas pueden venir a casa esta noche?
- Si, obvio, pero necesito saber que pasó para no preocuparme todo el día, sino los cálculos del edificio que estoy dibujando me van a salir mal…
- No mientas Sofi, vos lo que quieres es chismear jajajaja
- Basta chicas, acá no podemos hablar, estamos en el restaurante que hay en la esquina del trabajo.
- Les doy un adelanto… tenemos un jefe buenorro que está para comerlo en dos panes como desayuno y alguien que está al lado mío ya cató ese vinito…
- Queeeee???
- ¿¿¿Cómo???
- No puedo creerlo Julietta, vos sos la sensata del grupo.
- Jajajajajajajjajajajajajjaa estuvo bien?
Julietta se pone roja como un tomate y no puede hablar, sólo sonríe.
- Ok, por tu cara se nota que disfrutaste. ¿Vas a volver a tomar ese vino?
- Sofi por la mirada que tiene… esta contando los minutos que faltan para volver a probarlo.
- Yo quedé en shock, pensé todo menos eso, pensé que la iba a despedir.
- Bueno ya tienen un adelanto, ahora voy a tratar de concentrarme en el caso que tengo y no me deja dormir.
- Chicas, nos vemos en un rato… traigan algo fuerte porque esto está que arde.
- Ok, Maru, nos vemos en un rato. Llevo un tequila que me regaló mi jefe.
- ¿Como es eso Sofi? ¿Tu jefe te regaló un tequila? ¿Como puede ser que yo sea la única de las 4 que tiene un ogro como jefe?
- Somos dos Eva Jajajajajaja me parece que Sofi tiene algo que contarnos…
- Cállense lenguas largas jajajaja
- ¡Oh my god! ¿Le embocamos… qué pasó Sofi?
- Por ahora nada, la que importa en este momento es Juli, lo mío puede esperar.
- Sofi, te salvas por hoy. Nos vemos en un rato que llegó mi jefe. Las quiero chicas.
- Genial, nos vemos. Las quiero.
- Beso
- Bye!
Después de cortar la llamada quedan en silencio con Maru… la que rompe el hielo es Julietta
- No me preguntes que pasó, hasta ahora no sé como llegamos a eso. Yo entré pensando en el trabajo y el me pidió que cerrara la puerta, nunca imaginé ni en mis más locos sueños que íbamos a terminar follando encima del escritorio. Y menos con alguien que recién conozco, es una locura demencial, me tendrían que internar. No es normal.
- Puedes parar con el autocastigo. Acá lo que importa no es si lo conoces de hace unas horas o de siempre, la pregunta es si lo hiciste conscientemente o él te forzó.
- No… en todo momento estuve consciente y tengo ganas de volver a verlo y repetirlo, eso es lo más loco de todo.
- ¡Por dios es el Dios del Sexo! Te enganchó como si fuera una droga. No necesito hacer la segunda pregunta porque se nota que lo disfrutaste.
- Me encantó, eso es lo más loco de todo. Y quiero repetirlo.
Maru mira la puerta y queda congelada, Julietta se gira y se pone colorada porque ve a Ignacio con un amigo, él inmediatamente la ve y sonríe y se acerca hacia donde están sentadas.
- Creo que tendríamos que volver a la oficina, ¿no?
- Hola, chicas, como están. ¿Ya se van?
- Jefe, ¿cómo está? ¿Vino a probar la comida?
- Si María, vine con mi amigo Francisco. Los dos estamos hambrientos.
- Hola, un gusto.
María se atraganta con el agua que estaba tomando y Juli se levanta para ayudarla.
- Hola, soy Julietta. Nosotras ya nos estábamos yendo.
- Si quieren quédense, no hay mucho trabajo, además ninguno de los dos muerde.
- No Ignacio, gracias. Tenemos que ponernos al día con un caso complicado que tenemos.
- Si, eso mismo jefe.
- ¿estás bien María?
- Si, gracias jefe.
- Bueno cualquier duda si quieren yo las ayudo. Pueden pasar por mi despacho en cualquier momento.
- Ok, gracias. Cualquier duda que tengamos la mando a Julietta a que le pregunte.
- Bueno nos vemos en la oficina. Vamos Maru que sino se nos hace tarde y las chicas se enojan si demoramos en salir del trabajo.
- ¿Chicas?
- Si, hoy nos reunimos con unas amigas en la casa de Juli.
- Ah bueno, que tengan una buena tarde, voy a pedir la comida para llevar.
Llegan a la oficina y se ponen a trabajar por alrededor de 3 horas sin parar hasta que una llamada telefónica interrumpe el pensamiento de Julietta.
- Buenas tardes, habla la Dra. Pedraza.
- Doctora necesito un favor.
- ¿Quién habla?
- Habla el que te tuvo encima de su escritorio y te hizo venir como una loca.
- Dígame jefe, que necesita.
- Hoy quedamos en que nos íbamos a ver después del trabajo.
- Eh… si….
Mientras la charla continúa, María mira anonadada la conversación y decide levantarse e irse a su oficina para darle privacidad a Julietta.
- Julietta, necesito verte.
- Hoy no puedo, debo verme con mis amigas.
- A que horas te desocupas.
- No lo sé Ignacio, no te puedo decir una hora porque muchas veces se quedar a dormir en mi casa.
- Por favor, me puedes avisar cuando quedes libre, sino voy a tener que repetir lo que pasó esta mañana, pero ahora en tu escritorio. ¿Escucho por aquí tus gemidos… te gustó la idea? Si quieres ya voy para ahí.
- No, por favor. Vamos a tratar de comportarnos en el trabajo. ¿Yo te aviso cuando termine, ok?
- Ok
Ignacio corta la comunicación sin otra palabra dejando a Julietta descolocada.
Una hora más tarde, Julietta se está arreglando en el baño de su oficina y siente que la puerta se abre, pensando que es María le dice…
- Maru, estoy en el baño arreglándome, ya salgo.
Pero en realidad no es María quien apareció…
- Hola
- ¿Qué haces acá Ignacio?
- Vine a reclamar mi beso de despedida.
- No seas payaso.
- Es verdad, no aguantaba más sin verte.
- Para Ignacio… tenemos que ir más despacio, hace 12 horas que te conozco.
- Yo hace más tiempo que te conozco, para ser precisos hace un año que te vi por primera vez en tribunales. Y me dejaste encandilado. Ahí no sabía que eras abogada de este bufete.
- Basta Ignacio. Tenemos que frenar esto, necesito ir más despacio, no puedo estar así, soy una persona razonable, y hoy en tu despacho me volví loca. No puedo tomar decisiones de esta manera.
- Ok, tienes razón. Te voy a dar tiempo y espacio, pero quiero verte fuera de la oficina para conocerte. Y convencerte de que soy la mejor opción.
- Jajajaja no seas payaso.
Julietta suspira y dentro de ella tiene un choque de emociones, por un lado, quiere seguir adelante con lo que siente por Ignacio y ver a donde los lleva, pero por otro tiene miedo y quiere frenar un poco la situación.
Por ahora va a frenar y hablar con sus amigas que son su conciencia andante.
Agarra sus cosas y pasa por al lado de Ignacio que todavía sigue en su oficina y le dice…
- Gracias por respetar mi decisión.
Julietta le da un beso en la mejilla, pero Ignacio lo convierte en un beso en la boca
- Ignacio…
- Perdón es que tus labios son mi perdición…
Suena el teléfono de Julietta, son las chicas, salvada por la campana….
- Me tengo que ir. Nos hablamos después.
En eso la llama Sofía…
- Sofi, ya salgo. ¿Vas directo a casa, ok?
- Dale, Juli, nos vemos en un rato, mándale un saludo a tu jefe.
Por otro lado, Ignacio agarra su teléfono y llama a Francisco, necesita un amigo en quien confiar.
- Francisco, ¿Qué haces? ¿Trabajas hasta tarde?
- Nacho, ¿Qué está pasando? Dos veces hablarnos en el mismo día. Algo grave te debe de estar pasando… ya me estoy yendo para casa, la arquitecta ayudante ya se fue así que no tengo a quien torturar jajaja.
- Jajajaja no seas malo, pobre mujer que hizo para que le hagas eso?
- Nada, nada es que Sofia me vuelve loco, pero vamos… problema por problema, pásate por casa en una hora que te espero con una botella de whisky del que te gusta.
- Gracias, hermano… nos vemos en un rato.