Dos semanas después, Alessandro estaba de regreso a Roma con la que ahora es su familia, su mujer y su hijo. Dante ya no registraba como hijo de madre soltera, ahora era Dante Berlusconi Leroux. Cuando llegaron un gran recibimiento los esperaba con pancartas hechas por su hija. Los vieron venir y su hija corriendo a sus brazos fue a su encuentro.
- ¡Papá Volviste! ya te extrañaba.
La tomó en sus brazos dando vueltas mientras ella reía feliz.
- Yo también te extrañé mi amor. - Respondió un Alessandro feliz. Tenía a su familia ya su hija.
La sorpresa más grande del día fue ver a los padres de Alessandro en el aeropuerto llegando de Alemania.
- ¡Padre! No me dijiste que venías.
Dijo abrazando a su madre y luego a su padre.
- Quise venir a ver cómo ibas, darte una sorpresa y los sorprendidos somos nosotros .
Dijo mirando a Alexa. Alessandro Se acercó a ella tomándola de la mano, y caminando a ellos.
- Padre, madre les presento a mi mujer y a mis hijos, Luggina y Dante.
Luggina se acercó a