Terminan de cenar y como Aitiana está muy cansada, decide irse a dormir temprano, se despide y se va a su habitación.
Ignacio se encierra en su despacho con la excusa de que tiene mucho trabajo atrasado.
- ¿Qué sucede, mamá? Que se nota un clima tenso en casa.
- Hijo, vamos a tu habitación, así podemos conversar tranquilos, aquí las paredes oyen - ambos se van mientras, Lety los observa en silencio.
- Permiso, Ignacio, te traje un café, deberías descansar - dice Lety mientras apoya la taza en el escritorio.
- Recién subí a ver si mi niña necesitaba algo y ya estaba durmiendo plácidamente, la cubrí y aquí te traje tu café.
Estás feliz de tenerla aquí en casa, porque yo sí - sonríe alegremente. Mira qué me trajo mi niña - ella le muestra una hermosa cadena de oro con un dije de diamante.
- ¡Qué bonita Lety! Me alegro mucho, tú te mereces eso y mucho más. Siéntate un minuto, que quiero conversar contigo.
- No, Ignacio, si entra Irma y me ve sentada conversando aquí contigo, se molesta, m