Nunca la habían besado así, como si quisieran arrebatarle el aliento, con hambre, comiéndole la boca sin pausa. Respondió del mismo modo hasta qué pareció quedarse sin respiración. Cuando se separaron, se miraron por varios segundos, él aun rozando su rostro con un dedo, delineando sus labios y sonriendo con gesto tan seductor que sintió que era otro golpe a su confianza.
—Intuía que eras intensa y este beso acaba de confirmarlo—dijo, sin dejar de mirarla.
—Yo…—buscó recomponerse y que no se trasluciera cómo estaba de afectada—. Quiero que sepas que no ha sido fácil para mí aceptar esto…Dar este paso. Supone ir en contra de varias cosas que daba por sentado.
—¿Como cuáles? —él atrapó una de sus manos y la acarició con un dedo, haciendo vibrar a su piel.
—Bien… Eh…—Él tenía un efecto muy fuerte sobre ella, tanto que le costaba articular y dejar de seguir esa mano que hacía círculos en su palma y se extendía a su brazo, enviando mensajes sensoriales directos a su bajo vientre—. En princ