De nuevo liderando a su equipo, los New Jersey Devil´s, escuchando las paredes del Prudential Center temblar bajo los gritos y la algarabía del público que colmaba las instalaciones. Familias, amigos, fanáticos de toda la costa Este se habían dado cita para disfrutar de un partido antológico. Era volver a disfrutar del deporte que amaba. Se sentía liviano y preparado para dar lo mejor, alentado por el impulso de sus compañeros y los gritos de las tribunas que no cesaban de corear su nombre.

Su vuelta a la titularidad había sido adecuadamente promocionada y todos tenían las expectativas puestas en él. No quería decepcionarlos, pero sobre todo quería disfrutar del juego. Especial importancia tenía el que su familia hubiera viajado especialmente para estar con él y acompañarlo. Esto incluía a Sharon, por supuesto, que había viajado en el avión con sus hermanos. Había insistido a Kaleb para que se asegurara de ello y aquel había cumplido. Sin preguntar, probablemente enterado por Jace de