Jennifer Stone
El sábado me levanto temprano y arreglo a mi hijo lo mejor que puedo, voy a visitar a mi madre, hace casi tres años que no la veo y ella ni siquiera sabe que tuve a mi bebe.
Sé que estuvo mal ocultarlo, pero no quería que ella fuese de boca floja a decírselo a Samir, fui muy tonta al hacerme a un lado por la intrigas de Daniella y de mi suegra.
— ¿A dónde vas?— Cuestiona Samir desde la cama.
—Voy a visitar a mi madre. — Le respondo, mi madre siempre lo ha tratado mal, pero Samir siempre ha sido un caballero.
—Voy contigo. — Me responde apresurando a arreglarse.
—No sé si sea buena idea. — Le respondo mordiendo mis labios.
— ¿Por qué?, sabes que en algún momento me ganare su corazón. — Me responde y me hace reír.
—Samir estamos juntos desde que tenía quince años, ya tengo veintisiete ¿crees que cambiara?,. —. Cuestiono incrédula.
—Veras que si. — Me responde, yo no lo creo.
Samir busca un traje similar al que lleva nuestro hijo, quiero llorar al verlos juntos se